En los años cincuenta, el político y candidato presidencial, Dwight Eisenhower marca tendencia y da origen al marketing político al contratar, en 1952, a una agencia de publicidad para crear su campaña electoral en la televisión estadounidense. Poco tiempo después surge el debate más celebre de la televisión: Nixon vs Kennedy.
Hoy en día la historia es otra y el marketing político ha acudido a muchas técnicas de mercado para lograr sus fines. Esta disciplina ha cambiado la forma de las campañas electorales alrededor del mundo y convirtiéndose en una tendencia política.
Para que nuestras acciones de marketing político estén bien encaminadas debemos tener en cuenta estos puntos:
Crear una marca política
Una marca es identidad, un símbolo y un distintivo. Su importancia reside a partir del concepto mismo, en este punto se determina qué imagen del candidato será proyectada socialmente.
Esta marca política se consolidará a través del branding, es decir, el proceso de creación de una personalidad e identidad. Y para la creación de un branding político exitoso se debe:
- Ser autentico: Detrás de cada marca política hay una historia, mientras más real y autentica sea más fuerte será el vinculo emocional con los votantes.
- Elegir buenos embajadores de la marca: La marca necesita personas que puedan hacer llegar el mensaje a las masas, líderes de opinión con talentos frente a la audiencia.
- Trabajar el slogan de la marca: En la era moderna, las campañas políticas más exitosas se caracterizan por contener un slogan poderoso que representa los ideales de los votantes.
Analizar el mercado electoral
Es fundamental saber qué mueve a las personas y como ganarse la confianza del elector. Por eso, hay dirigir las acciones de marketing político a tres segmentos importantes:
- Votantes que simpatizan con el candidato y apoyan su ideología.
- Votantes que conocen al candidato, pero están en desacuerdo con sus ideas.
- Votantes que no están decididos aún.
Comunicación
La comunicación política se ocupa de producir, difundir y diseminar a través de los medios de comunicación masivos en un contexto político.
El candidato, antes que nada, es una persona real. Transmitir la similitud entre la figura política y el electorado ayuda a crear empatía. Proyectar la confianza establecida al mostrar al candidato como una persona sincera y accesible crea un vínculo fuerte.
Aplicar las cuatro P
Así como se aplican las 4P en el marketing tradicional, en el marketing político también es necesario aplicarlas adaptándolas a su mercado objetivo.
- Precio: El voto, lo que paga el elector a cambio de obtener el beneficio que desea.
- Producto: Candidato, partido político y programa de gestión.
- Promoción: Incluye todos los canales por donde el candidato y el partido político difunden sus mensajes, poniéndolos a disposición de la población,
- Plaza: Este punto determina cómo vamos a promocionar al candidato (medios) y dónde hacerlo (canales).
Elaborar un plan de marketing digital
La elección de canales digitales, frecuencia de publicidad y publicaciones son elementos de las estrategias digitales. Dividir a la porción de electores, a quienes apuntamos y el lugar que deseamos ocupar en sus mentes. No basta con predicar las posturas a través de la campaña digital, sino que el candidato debe ser consecuente con ello. Todos los canales a través del cual se manifiesta deben ser congruentes.
El marketing político es, en esencia, una disciplina en donde aplicando las técnicas correctas podemos lograr el éxito en una campaña y durante la gestión de nuestro candidato, encaminar sus decisiones y lograr la empatía con los votantes.
claro y util el contenido. Por favor me gustarÃa obtener más informaciones del tema, gracias