Entre los países que desde su política de gobierno están apuntando al desarrollo del emprendimiento destaca Chile y más recientemente Colombia. Chile lleva una delantera muy interesante con una política de Estado sobre la Innovación, apoyada a través de CORFO, ellos apoyan emprendimientos de base tecnológica en varias etapas, inclusive provenientes de toda América Latina, a quienes beca y les ofrece un programa de aceleración por 1 año, esta estrategia también la orienta por sectores, de modo de generar capacidades para el país.
Colombia recientemente acaba de crear una Ley de emprendimiento social, sin embargo, aún no cuenta con los mecanismos para llevarla a cabo, sin estos mecanismos institucionales, se corre el riesgo de entrar en ciertas burocracias que no le permitan el avance y en consecuencia, el efecto positivo hacia el crecimiento de su ecosistema, no obstante, Colombia desarrolla buenas estrategias de formación a través del SELA. Las Universidades como la EAN e instituciones del Estado como INNPULSA están abriendo financiamientos e iniciativas hacia el sector social.
En Perú, existen universidades como Academia que se enfocan en la formación de emprendimientos y otros centros de innovaciones en las principales universidades, sin embargo, su enfoque es solamente de negocio en la mayoría de los casos.
Venezuela, posee un ecosistema emprendedor atomizado y con necesidades de articulación, con buenos niveles en temas de formación y aceleración, sin embargo, muy concentrado en las ciudades principales. Recientemente, se desarrolló un proyecto que dio cuenta de un Mapeo del Ecosistema donde en términos generales la necesidad de enfocar hacia áreas de desarrollo y el fortalecimiento de capacidades y habilidades emprendedoras, así como oportunidades financieras son necesarias en un ecosistema inmaduro.
En transformación digital, hay un espacio pujante en países como Chile, Colombia, menos en Perú, Venezuela y Bolivia. Sin embargo, Venezuela a pesar de las limitaciones en acceso a internet sigue siendo un país con mucho potencial en términos tecnológicos, Venezuela ha sido reconocida por una importante mano de obra en diseño y desarrolladores.